Verificar la estabilidad de las estructuras principales
Revisar grietas en muros y columnas
Evaluar daños en cimentaciones
Inspeccionar techos y cubiertas
Revisar daños en vigas y trabes
Verificar nivel de asentamiento del suelo
Evaluar daños en escaleras y rampas
Inspeccionar muros de contención
Revisar posibles deformaciones en la estructura
Evaluar daños en instalaciones eléctricas
Verificar estado de sistemas de drenaje
Revisar daños en bardas y cercas perimetrales
Inspeccionar el estado de las fundaciones
Evaluar daños en elementos no estructurales
Verificar la presencia de humedad en muros
Revisar la integridad de las juntas y conexiones
Evaluar posibles daños por efectos de viento
Inspeccionar posibles desplomes o inclinaciones
Revisar la presencia de fisuras en elementos estructurales
Tomar fotografías de los daños encontrados