Establecer acuerdos claros con proveedores clave
Realizar un seguimiento regular de los niveles de inventario
Implementar un sistema de gestión de pedidos automatizado
Mantener una comunicación fluida con todos los eslabones de la cadena de suministro
Optimizar los procesos de picking y packing en el almacén
Realizar análisis de demanda para prever picos de ventas
Establecer indicadores clave de desempeño (KPIs) para medir la eficiencia de la cadena de suministro
Implementar tecnología RFID para el seguimiento de inventario en tiempo real
Capacitar al personal de logística en buenas prácticas y últimas tendencias
Realizar auditorías periódicas de los procesos de la cadena de suministro
Establecer un plan de contingencia para posibles interrupciones en la cadena de suministro
Evaluar continuamente a los proveedores en base a calidad, costos y tiempos de entrega
Implementar un sistema de gestión de devoluciones eficiente
Realizar análisis de costos logísticos para identificar áreas de mejora
Mantener actualizado el catálogo de productos con información detallada y precisa
Establecer políticas claras de envío y tiempos de entrega
Implementar estrategias de embalaje sostenible y ecoamigable
Realizar pruebas de estrés en la cadena de suministro para identificar vulnerabilidades
Establecer un sistema de retroalimentación con los clientes para mejorar la satisfacción
Mantener un registro actualizado de los proveedores y sus condiciones contractuales
Implementar un sistema de monitoreo de la cadena de suministro las 24 horas del día