Identificar las necesidades específicas de cada paciente
Realizar evaluación de riesgos y necesidades geriátricas
Desarrollar un plan de atención individualizado
Implementar medidas de prevención de caídas
Mantener registros actualizados de la atención proporcionada
Coordinar con profesionales de la salud interdisciplinarios
Proporcionar educación a familiares y cuidadores
Promover la autonomía y la calidad de vida del paciente
Realizar evaluaciones periódicas de la evolución del paciente
Ajustar el plan de atención según necesidades cambiantes
Promover la comunicación efectiva con el paciente y la familia
Evaluar la satisfacción del paciente con el servicio
Fomentar la participación activa del paciente en su atención
Mantener la confidencialidad de la información del paciente
Capacitar al personal en cuidados geriátricos especializados
Fomentar un entorno seguro y adaptado a las necesidades del paciente
Establecer metas terapéuticas claras y alcanzables
Realizar reuniones de equipo para discutir el caso del paciente
Utilizar tecnologías apropiadas para mejorar la atención
Mantener una comunicación fluida con el médico tratante del paciente