Verificar la autenticidad de los proveedores
Examinar las fechas de caducidad de los productos
Revisar los registros de temperaturas de almacenamiento
Realizar pruebas de laboratorio en los productos sospechosos
Inspeccionar las condiciones de almacenamiento
Verificar la trazabilidad de los productos
Entrevistar al personal involucrado en la manipulación de alimentos
Examinar los certificados de calidad de los proveedores
Revisar los procesos de limpieza y desinfección
Verificar la correcta segregación de alimentos
Auditar los sistemas de control de calidad internos
Realizar inspecciones sorpresa en el almacén
Revisar los registros de compras de ingredientes
Comprobar las condiciones de transporte de los productos
Evaluar la capacitación del personal en seguridad alimentaria
Revisar los controles de plagas
Verificar la información nutricional en el etiquetado de los productos
Evaluar el historial de quejas o reclamaciones de los clientes
Revisar los registros de producción
Verificar la trazabilidad de los alimentos en proceso