Verificar que las puertas del muelle de carga estén debidamente cerradas.
Revisar que los topes de seguridad estén en su lugar y en buen estado.
Inspeccionar las señales de advertencia y precaución en el área de carga.
Verificar que los sistemas de iluminación estén funcionando correctamente.
Revisar que las rampas de acceso al muelle estén en buen estado y sin daños.
Comprobar que los bloqueadores de ruedas estén colocados.
Inspeccionar el piso del muelle en busca de irregularidades, hundimientos o desgaste.
Revisar que los extintores de incendios estén presentes y en buen estado.
Verificar que los sistemas de detección de humo y alarma funcionen correctamente.
Comprobar que los sistemas de ventilación estén operativos.
Inspeccionar las protecciones en las puertas de acceso al muelle.
Revisar que los extintores en el área de carga tengan carga completa.
Verificar que los equipos de emergencia, como botiquines, estén disponibles.
Comprobar que los sistemas de comunicación, como teléfonos, funcionen correctamente.
Inspeccionar los dispositivos de seguridad en los montacargas.
Revisar que el personal que opera en el muelle cuente con el equipo de protección adecuado.
Verificar que el área de carga esté claramente delimitada y señalizada.
Comprobar que los sistemas de cierre y bloqueo en las puertas estén funcionando.
Inspeccionar los niveles de ruido y vibración en el muelle.
Revisar que los equipos de carga estén en buen estado y funcionando correctamente.
Verificar que no haya obstrucciones en las áreas de paso y de emergencia.
Comprobar que los sistemas de drenaje estén despejados y funcionando adecuadamente.
Inspeccionar los sistemas de seguridad en las puertas automáticas.
Revisar que los muelles de carga estén libres de materiales inflamables o peligrosos.
Verificar que los sistemas de seguridad contra incendios estén en buen estado y operativos.